12 de febrero de 2010

La vie de bohème

>> Estos son fragmentos, "in medias res" y al boleo, de escenas y palabras profundas que atestigüé. Una cosa de locos, sinceramente.

Y, enfurecidos, los jóvenes decidieron subir al escenario…

“Sería prudente que empecemos a separarnos de la idea del “hombre común”. De nada sirve, ¿o sí?, tenerlo todo si somos cobardes a la hora de aceptar al otro como igual”, gritó a todos los chicos uno de los hombres que estaba con ella.

“Aparte, ¿quién les dijo que la comodidad es superior al heroísmo, que la sociedad se divide en géneros y que la aventura es cosa de románticos?”, agregó Micaela.

“ “Abarrotemos salas de cine, pero nunca seamos protagonistas de nuestras propias historias”, resuena en la conciencia del burgués con empleo fijo y seguro ", terminó por decir el otro chico, haciendo gestos de burla con sus manos.


[Para mí que vivir…es otra cosa]


Esa misma tarde, en la calle y bajo la lluvia, me encaró y me dijo:

“Sin embargo, habiendo aprendido a aceptar que lo vivido es hoy necesario, me encuentro en condiciones de decir que orgullosa estoy de haberte amado”

“Cuando debo enfrentarme a alguna inquisición, sólo soy valiente porque te imagino viéndome”, le respondí.

“Yo no se lo que significa el amor, pero me ha llevado a ser quien soy. Debe ser, entonces, el instrumento que nos tuerce a nuestro destino”, pensó ella antes de darse vuelta, con los ojos inundados, y correr.

“Del ejemplo de quien he amado llego a cambiar en lo que mi Dios me tiene pensado. Nuestra atracción fue siempre trascendental, con un sentido mayor al mundano”, me quedé pensando.


[Nunca sabré lo que es vivir…]